miércoles, 7 de septiembre de 2011

Misantropía

Frío. Aunque estoy rodeada de gente, no siento calor humano. ¿Por qué? Miedo. Miedo a ser traicionada y herida, miedo a ser marginada. Por ello, decido estar en un rincón. Si te digo la verdad, estoy cómoda sentada en el suelo, apoyando la espalda contra la pared. No veo calor en la gente. Sólo soy capaz de leer en el rincón. Iría a la gente…

Pero las heridas psicológicas siguen abiertas. El recuerdo del sufrimiento sigue en mi corazón. Llámame cobarde, pero el dolor aún sigue bajo mi piel, y retorna a mi mente torturándome cada vez que veo gente como la que me hizo aquello. Sigo enfrascada en mi lectura, una de Nietzsche. Se sienta un chico a mi lado. Me levanto y me largo. ¿Cobarde? Sí. Pero ese chico podría ser de los que me clavaron dagas en el pasado.


2 comentarios:

Jesús Ricardo González Leal dijo...

Muy interesante. Cortito pero intenso. Me gusta muchísimo. =) ^^ ¿Alguna vez has pensado en escribir filosofía?

Susabea Montesinos dijo...

Gracias por tu comentario, tío.

No, nunca me planteé´esribir filosofía, no me veo nacida para ello, ya sabes de mi experiencia con Nietzsche.